Cómo Dejar de Elegir lo que te Lastima
¿Elegís desde el amor o desde la herida? Descubrí cómo dejar de repetir patrones y empezar a decidir desde tu versión más sana y consciente.


¿Y si te dijera que muchas de las decisiones más importantes de tu vida no las tomaste vos, sino tu herida?. Esa que nació cuando no te eligieron, cuando te ignoraron, cuando te hicieron sentir que tenías que ganarte el amor. Esa herida es sutil, estratégica y convincente. Te hace creer que estás eligiendo con intuición, pero en realidad estás repitiendo desde el dolor. En este artículo, vamos a ir profundo, pero con estilo, sin vueltas; porque llegó el momento de elegir distinto; desde la conciencia, no desde el trauma.
¿Por qué hablamos de esto ahora?
Porque estamos viviendo un boom del bienestar, de la conciencia emocional, del "elegí lo que te hace bien"; pero nadie te cuenta que a veces lo que crees que te hace bien es justo lo que te mantiene atrapado. Porque la herida es experta en disfrazarse de deseo, de corazonada, de química, de destino. Y no, no es tu culpa. Es tu cerebro queriendo protegerte, aunque a veces lo haga como puede.
Sí, muchas veces elegimos parejas, trabajos, amistades o incluso estilos de vida para sentirnos seguros, aceptados, validados. Pero si esa seguridad está basada en mecanismos antiguos de protección emocional, lo que hacemos no es elegir… es repetir.
Tu herida tiene voz. Y muchas veces, suena como tu voz interior
¿Nunca te pasó de pensar “esto me vibra”, “algo me dice que es por acá”... y después te diste la cabeza contra la pared? Bueno, tal vez no era intuición, era un patrón activo. Porque cuando no sanamos, confundimos el eco del trauma con la guía del alma. Suena profundo, y lo es.
Las neurociencias lo explican: cuando algo nos recuerda, aunque sea levemente, a una situación de peligro emocional del pasado (como el abandono, la humillación, la traición), se activan los mismos circuitos cerebrales. Y en lugar de responder desde la adultez consciente, respondemos desde el niño o niña herida, desde el modo supervivencia, desde el “esto me suena familiar, por ende, es seguro”... aunque duela.
Elegir desde la herida es como usar Google Maps con un mapa de hace 15 años
¿Sabes lo que pasa si lo haces?, Vas a dar vueltas, a perderte, a terminar en barrios donde ya no vivís, donde no quieres estar, y después te frustras, te juzgas, te preguntas por qué te pasa siempre lo mismo. Pero no es falta de inteligencia emocional, es falta de actualización.
Tus heridas emocionales son como rutas grabadas en tu sistema nervioso, no basta con saber que existen; hay que desaprenderlas; y reprogramar. Con amor, con tiempo, con guía. Porque sanar no es olvidar, es dejar de reaccionar desde el pasado.
¿Cómo darte cuenta si estás eligiendo desde la herida?
Sentís mucha ansiedad al principio, como si “te jugaras la vida” en esa decisión.
Idealizas a la otra persona o situación de entrada, sin ver señales claras.
Te sentís “en casa” en lugares donde hay confusión, falta de reciprocidad o caos emocional.
Si todo sale bien, tienes miedo de que se arruine. Si algo sale mal, crees que lo merecías.
Después de elegir, aparece el vacío, la incomodidad, la culpa.
¿Qué puedes hacer hoy para empezar a elegir distinto?
Una práctica profesional, efectiva y moderna: antes de tomar una decisión importante, pregúntate: ¿Esta elección me representa hoy, o es una respuesta a una versión vieja de mí, que solo quiere sentirse protegida?.
Hazte esa pregunta con honestidad, respóndela con la misma compasión con la que escucharías a alguien que amas. Porque eso también es autocuidado, porque elegir desde el amor propio, no siempre se siente “natural” al principio; pero sí se siente en paz.
Y si te cuesta ver claro, si sentís que estás enredado en decisiones repetitivas, si hay un patrón que no sabes cómo soltar… no tienes que hacerlo sola o solo.
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Porque la verdadera libertad emocional empieza cuando dejamos de elegir con el mapa de nuestras heridas, y empezamos a crear una vida desde el deseo sano, no desde la repetición del dolor.
Sanar es posible, elegir distinto también, y empieza hoy.
Romina Di Stéfano
Creadora de HolaTerapia
