Aprender del fracaso es la clave del éxito
He fallado en bastantes cosas en mi vida, Cuando era niña, probé: piano y guitarra, ambos con resultados mediocres (en el mejor de los casos). Rápidamente, me deshice de los instrumentos e intenté con los deportes. Pero aprendí que, a pesar de mi voluntad, no me daba el físico para el hockey sobre césped, ni para el patinaje artístico, ni para el vóley!! (Yo era terriblemente mala en el vóley, para ser justos).
De adulta, los fracasos continuaron. No conseguí ese “trabajo soñado” que quería, no logré terminar una novela, tuve una idea «brillante» para una nueva forma de hacer las cosas en el trabajo, y no funcionó. Incluso algunas relaciones y amistades fracasaron.
Pero en el camino, aprendí, aprendí de mis errores. Aprendí cuáles eran mis puntos fuertes. Aprendí hacia dónde quería llevar mi carrera. Aprendí que los fracasos no me definen. Aprendí que para tener éxito, necesitaba fallar. Y aprendí que es posible mejorar en algo, incluso después de haber fallado.
Cuando experimentas un fracaso, puedes sentirlo en tus entrañas, en tus rodillas y sobre todo en tu espalda. Puedes pensar para ti mismo: «Nunca voy a volver de esto». Tu confianza y autoestima pueden verse afectadas. Es posible que no quieras probar algo nuevo de nuevo.
A Thomas Edison le llevó 10.000 intentos perfeccionar la bombilla, a Arianna Huffington fue rechazada por 36 editores, la primera empresa de Bill Gates fue un completo desastre. Walt Disney fue despedido de un trabajo en un periódico por falta de creatividad. Michael Jordan fue eliminado del equipo de baloncesto de su escuela secundaria. Oprah Winfrey fue despedida de su primer trabajo, donde sufrió acoso sexual en un ambiente de trabajo hostil.
Las personas más exitosas del mundo han fracasado, a menudo, más de lo que puedes percibir en una entrevista, en una reunión, en Instagram. ¿Cómo estás aprendiendo del fracaso? ¿Qué lecciones te puede enseñar el fracaso? ¿Dónde puedes encontrar gratitud en el fracaso?
¿Qué es el fracaso?
Todos hemos experimentado el fracaso; y, sinceramente, nuestra definición de fracaso puede variar según nuestras experiencias. Entonces, ¿Qué es el fracaso?. En esencia, el fracaso se define como la falta de éxito. El fracaso se define como la incapacidad de cumplir con una expectativa. Estos son algunos ejemplos de fracaso:
- Un estudiante de secundaria necesita obtener una A en un examen de matemáticas para poder pasar de año. Este se prepara de forma individual y toma clases particulares con el mejor de los profesores. Cuando obtiene el resultado, su calificación es de una C+.
- Un médico ha realizado 2 especialidades, está calificado de manera brillante en todas las instituciones en las que ha estudiado; pese a su esfuerzo, no logra conseguir empleo.
Un fracasado es un hombre que ha cometido un error, pero que no es capaz de convertirlo en experiencia. (Elbert Hubbard)
Hay una creciente investigación y observación sobre lo que significa fallar; y podemos aseverar que si algo es un hecho fáctico es que, el fracaso ha sido un requisito previo comprobado para el éxito. Pero aquí está el problema: el fracaso solo funciona a tu favor si aprendes de el.
¿Qué aprendes del fracaso?
El fracaso duele, no nos hace sentir bien, puede poner a prueba nuestro perfeccionismo y nuestra fortaleza. Puede ser difícil levantarnos para volver a intentarlo. Entonces, ¿Qué aprendes del fracaso? Respuesta corta: mucho más de lo que piensas.
Resiliencia
Del fracaso, aprendemos resiliencia. Es difícil no aprender a desarrollar resiliencia después de un traspié, especialmente si estás decidido a superarlo. La resiliencia es una habilidad de vida importante para construirnos, y cuando lo haces, también te ayuda de otras inimaginables maneras en todos los aspectos de tu vida. La resiliencia puede ayudarte a desarrollar una mentalidad de crecimiento, puede ayudarte a adoptar los comportamientos correctos para superar el cambio, y sobre todo, ayudarte a desarrollar agallas, tenacidad y motivación.
Humildad
Nuestro ego es sensible, puede crecer y evolucionar hasta convertirse en bestia con vida propia. La mayoría de las veces, una buena dosis de fracaso es buena para nuestro ego, nos mantiene humildes. El fracaso puede enseñarnos cómo encarnar características relevantes, que harán de nosotros grandes líderes.
Flexibilidad
Incluso los planes mejor trazados se interrumpen, y eso también se aplica a los fracasos. Es posible que hayas establecido una meta y que esta, no haya llegado al lugar deseado; quizás sobreestimaste las opciones, idealizaste situaciones, o simplemente no tuviste en cuenta el panorama completo. Has aprendido de tu primer fracaso que necesitas ajustar tu objetivo, o tal vez, hacer un giro más comprometido y diferente al anterior. Solo necesitas ajustar su enfoque. Aquí es donde entra en juego la flexibilidad. A menudo pienso en la frase: no se puede hacer lo mismo y esperar resultados diferentes. Los fracasos nos enseñan flexibilidad, adaptabilidad y cómo superar los obstáculos; nos enseña a usar el cambio a nuestro favor, nos mantiene ágiles y nos ayuda a adoptar esa mentalidad abierta.
La innovación y la creatividad
Al igual que la flexibilidad, la innovación y la creatividad pueden presentarse como lecciones de fracaso.
Estudié escritura creativa, y uno de mis profesores favoritos solía felicitarnos por completar un primer borrador horrible; y nos solía decir: “Está bien el primer borrador y aunque es imposible de utilizar, se pondrá mejor y mejor en tu tercer, cuarto y quinto intento”.
Edison no encendió la bombilla en el primer, segundo o milésimo intento, se necesitaron 10.000 intentos para perfeccionar la bombilla. La innovación y la creatividad toman tiempo, iteraciones y fallas en el camino.
No he fracasado. He encontrado 10000 soluciones que no funcionan. (Thomas Alva Edison)
Motivación
Soy una de esas personas que cuando alguien me dice que no puedo hacer algo, me hace mucho más fuerte y decidida a demostrar que están equivocados.
La motivación es una lección valiosa e importante del fracaso. Ver el progreso en el camino es un gran motivador.
Aquellos que ven en cada desilusión un estímulo para mayores conquistas, ésos poseen el recto punto de vista para con la vida. (Goethe)
¿Por qué es importante aprender del fracaso?
Somos seres humanos, eso significa que entramos en este mundo con muchas oportunidades de crecimiento y desarrollo personal. Juntos, estamos en este viaje colectivo para mejorarnos a nosotros mismos (y al mundo que nos rodea), pero para hacerlo, necesitamos fallar.
Es valioso aprender del fracaso porque nos acerca un paso más al éxito. Se ha citado que uno de cada cuatro empresarios fracasa en su negocio antes de llegar a la cima.
El profesor de la Universidad de Duke, Sim Sitkin, acunó el término «fallas inteligentes», ¿Qué dice de ellas? Las fallas inteligentes son buenas para nosotros porque nos brindan conocimiento, valor y perspicacia. Lo que es crucial recordar es que necesitamos hacer una pausa y reflexionar; necesitamos prestar mucha atención a nuestros fracasos para poder aprender de ellos.
5 consejos para aprender del fracaso
Todos hemos fallado, pero podemos aprender a fallar con gracia para ayudar a acelerar el proceso de aprendizaje. Aquí hay cinco consejos para aprender del fracaso.
1. No te rindas
Todos hemos estado allí, por lo menos, yo si!. Un fracaso duele, y por inercia generalmente, queremos simplemente tirar la toalla.
Aquí está tu señal de que no deberías hacerlo, sé persistente en la búsqueda de sus sueños. Puede que sea necesario replantear las perspectivas, por ejemplo, ¿puedes dividir su gran meta en pequeñas victorias?
Tengo el objetivo de toda la vida de publicar un libro, he intentado escribir varias novelas a lo largo de los años; pero la idea de escribir un libro completo suena tan desalentadora e intimidante, que debo admitir que he abandonado esta idea una y otra vez; pero ahora, estoy en un par de clases de escritura creativa; me estoy fijando metas más pequeñas, más realistas con mi estilo de vida y responsabilidades. En lugar de tener un libro completo como meta, trato de concentrarme en escribir 2000 palabras a la semana; me mantiene motivada y evita que me rinda.
2. Adopta una mentalidad de crecimiento
Tienes que querer aprender a aprender realmente del, fracaso, para hacer esto bien, necesitas adoptar una mentalidad positiva y resiliente. Una mentalidad de crecimiento acepta los desafíos, los considera parte del camino de construcción propia y menester para llegar a cumplir nuestro desafío. Persevera incluso en los fracasos. Las personas pueden aprender, cambiar y adaptarse; ¿Quieres aprender y crecer? Acepta y acoge la retroalimentación constructiva y la crítica constructiva. No es fácil, pero una mentalidad fija no prepara a nadie para el éxito, piensa en formas en las que puedes cambiar tu perspectiva en torno a tus interacciones diarias para empezar.
3. Practica Atención Plena
Tomate unos minutos al día para verte, percibirte, contemplar tus acciones, tus objetivos a corto, mediano y largo plazo. Escucha tus alertas con objetividad y humildad, fluye a través de tu instinto y la pasión de tu propósito. Todo lo que tenemos para crear, transformar, y trabajar, están en el aquí y ahora. Encontrarás una mayor claridad, más productividad, mayor creatividad e innovación, y mucho más.
4. Sé valiente
Durante los Juegos Olímpicos de invierno, un video de una niña de cuatro años practicando snowboard se volvió viral . El padre de la niña la conectó a un micrófono para grabar su diálogo interno positivo mientras baja la montaña. En el video, puedes escucharla decir: “No me caeré, quizás lo haga, y si eso sucede, está bien porque todos caemos”.
Fracasar requiere coraje, pero volver a intentarlo después del fracaso lo requiere aún más. Está bien si fallas (y luego vuelves a fallar), pero ten el coraje de levantarte e intentarlo y volver a intentarlo.
5. Desarrollar aptitud mental
De la mano con una mentalidad de crecimiento viene la aptitud mental; mira el fracaso como un viaje de aprendizaje. ¿Qué habilidades puedes adquirir en el camino? ¿Qué herramientas puedes agregar a tu diario vivir? ¿Qué cosas nuevas puedes sacar de tus fracasos?
Comienza a construir tu plan de acondicionamiento mental con fallas como parte del trayecto viaje. Con una mayor aptitud mental , te encontrarás mejor equipado para sobrellevar los altibajos de la vida. HolaTerapia puede ayudarte en tu viaje de autoconocimiento y motivación.
Aprende a aceptar tus fracasos
Todo el mundo experimenta el fracaso, y muchas veces, es el miedo al fracaso lo que se interpone en el camino de nuestro éxito. El fracaso viene inherentemente con la idea de que es algo malo, pero en realidad, los mejores fracasos son los mejores maestros. Desde líderes empresariales hasta celebridades, las personas exitosas han experimentado fallas, frustraciones, incontables «NO» como respuesta.
Con la mentalidad correcta y permiso para fallar, puedes aprender lecciones valiosas. Nuestros fracasos pasados ??son parte de la experiencia de aprendizaje . Y a veces, son los grandes fracasos los que más nos enseñan.
¿Cómo puedes cambiar tu proceso de pensamiento en torno al fracaso? ¿Puedes enfrentar tu miedo al fracaso de frente? Alcanzar todo nuestro potencial humano significa que inevitablemente estamos condenados a equivocarnos; ¿Cuántas veces de niño has caído, para definitivamente puedas mantenerte en pie y caminar?. En lugar de revolcarte en la negatividad, prueba el coraje. En lugar de lástima, prueba la determinación. En lugar de la derrota, prueba la persistencia.
Aprender a fallar puede ayudarte a desarrollar tu aptitud mental, da un paso a la vez. Sé fuerte y no te des el lujo de dejar de intentar, puedes desbloquear todo tu potencial y alcanzar tus sueños. HolaTerapia puede ayudar, comienza con un terapeuta hoy.
Podemos detenernos cuando subimos, pero nunca cuando descendemos. (Napoleón Bonaparte)
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